Ser mujer no debería ser un riesgo, tampoco en Navarra

«Ser mujer no debería ser un riesgo» es una de las campañas que puso en marcha la aseguradora AXA el año pasado para concienciar de lo desprotegidas o sobreexpuestas que están las mujeres a los riesgos, y la responsabilidad que tenemos como sociedad.

Este 8 de Marzo, Día Internacional de la Mujer, queríamos compartir con vosotros los spots que la compañía preparó para la campaña y algunos datos que contextualizan los anuncios—y que podéis encontrar en su página web—. ¿Sabías, por ejemplo, que en el mundo solo el 33 % de las empresas pertenecen a mujeres?, ¿o que aún quedan 285 años para alcanzar la igualdad de género en el mundo?   

Faltan muchas barreras por superar y, como sociedad avanzada en la que vivimos, conviene recordar, aunque sea un día al año, que las mujeres corren algunos riesgos intolerables.

Somos conocedoras de que, por ejemplo, aquí en Navarra, las mujeres somos unas privilegiadas si nos comparamos con otras regiones del mundo. La igualdad es un hecho en la mayoría de los ámbitos y, dentro de nuestro sector, cada vez son más las mujeres quienes ocupamos puestos de responsabilidad. Sin ir más lejos, María Castañeda, gerente de la correduría de seguros, es presidenta del Colegio de Mediadores de Seguros de Navarra y responsable de la Comisión de Formación del Consejo General.

Pero, como dice el refranero, que los árboles no te impidan ver el bosque. Por eso, desde Castañeda & Asociados hemos recogido el testigo de AXA para realizar una lista de riesgos para las mujeres que cada uno puede completar a su gusto.

Ser mujer no debería ser un riesgo…

Si sales de noche.

Si te quedas embarazada.

Si viajas sola.

Si sobresales en la escuela. O en el trabajo.

Si destacas en el fútbol.

Si desafías a la autoridad defendiendo los derechos humanos. O si eres autoridad.

Si asumes cargos de responsabilidad.

Si desempeñas un trabajo asociado históricamente al género masculino.

Si…

¿Quién no ha conocido algún caso cercano en el que quedarse embarazada ha supuesto un techo para su carrera profesional? ¿Cuántas veces hemos escuchado que al volver a casa algunas mujeres sienten miedo? O leído en la prensa que dejarse ver en público sin el velo ha acabado en multa, latigazos o prisión. O testimonios de mujeres taxistas que, en el ejercicio de su profesión, han tenido que sufrir comentarios humillantes o proposiciones indecentes. Aquí, en Pamplona. Por no hablar de las futbolistas. Dio vergüenza ver vandalizado el mural de la jugadora de Osasuna Mai Garde en El Sadar.

Todos podemos hacer un ejercicio de reflexión este 8 de Marzo. Aunque sea un minuto. Por nosotras que, en algún momento de nuestra vida, hemos tenido o tendremos alguna dificultad que superar o un riesgo que asumir.

Ser mujer no debería ser un riesgo, tampoco aquí en Navarra.